La realidad es que es probable que últimamente pasemos más tiempo en casa durante las próximas semanas, y para motivarte y que sigas con tu rutina de deporte vamos a darte los mejores trucos para inspirarte y que practiques yoga en casa de forma práctica y divertida.

Qué necesitas para hacer yoga en casa

Esto es lo que te hace falta, lo que tienes que preparar y lo que necesitas saber para hacer yoga en casa con comodidad y seguridad:

Esterilla de Yoga

Es lo más importante y la única inversión que te recomendamos hacer. Las colchonetas de fitness no sirven para hacer yoga: son demasiado cortas, resbalan y se enrollan. Practicar con un mat específico de yoga es otro mundo, te permitirá no sólo disfrutar al máximo de la práctica sino que evitará que te resbales y te hagas daño. Puedes elegir cualquier modelo que se adapte a tu nivel,  en Equilibrium ¡los tenemos todos!

Accesorios

Además de la esterilla te recomendamos tener a mano un par de cojines (para sentarte en posición de meditación o hacer ciertas posturas) y una manta (para sentarte o cubrirte durante la relajación). Para ciertas prácticas puede resultarte útil tener a mano un strap y un bloque de yoga.

La ropa

Ponte ropa cómoda y traspirable pero mejor ajustada, ya que, si no, te molestará al hacer ciertas posturas, sobre todo invertidas. Comienza la práctica con una sudadera que puedas quitarte cuando entres en calor y ponerte de nuevo en la parte final para no coger frío.

Practica descalza

No sólo porque es increíblemente agradable y te proporcionará un masaje en los pies, sino porque es fundamental para no resbalar y tener propiocepción y equilibrio en las posturas. Con calcetines no sentirás lo mismo.

El ambiente

Para practicar yoga es importante que el espacio te resulte agradable, que la luz no sea fuerte, que haya ventilación y tengas a mano todo lo que necesites para la práctica.

La hora

Depende de ti. Hay quien adora practicar por las mañanas y quien prefiere las tardes. O quien, simplemente, practica cuando puede. Siguiendo un vídeo podrás hacer tu práctica cuando mejor te venga. Lo importante es que intentes seguir siempre el mismo horario y que escojas un momento del día en el que nadie te moleste.

No comas antes

Intenta no comer al menos una hora y media antes de la práctica para que no te sientas incómoda en ciertas posturas y tu energía no esté en la digestión sino en la práctica. Respecto a la hidratación, bebe antes, durante si lo necesitas y, sobre todo, después. Tomar agua, una infusión, un zumo natural o una kombucha resulta perfecto después de una práctica de yoga.

Respeta tus límites

Lo sabemos, los yoguis hacen posturas increíbles sobre todo en Instagram. Eso es inspirador, pero no es el objetivo del yoga. Si no quieres lesionarte o frustrarte y abandonar, es fundamental que hagas prácticas adaptadas a tu nivel. En yoga hay un principio básico, Ahimsa, que todo practicante, también los profesores, deben respetar: no agresión hacia ti mismo durante la práctica. En las posturas de yoga debes sentir, no sufrir.

Qué estilo elegir

Hay muchos estilos de yoga, desde los más relajantes como Yin Yoga, a los más atléticos como Ashtanga. Te recomendamos empezar con clases de Hatha Yoga para principiantes, de Yin Yoga o Yoga Restaurativo si tu forma física es baja. Y de Hatha Yoga intermedias y Vinyasa Yoga o Power Yoga para principiantes si tienes una buena forma física.